ESCRIBANO MONACAL

ESCRIBANO MONACAL
UNA GRAN OBRA MAESTRA REALIZADA EN MARFIL

jueves, 5 de abril de 2012

LA PRIMERA ASESINA EN SERIE DEL REINO UNIDO




           

            Se llamaba Mary Ann Cotton, aunque ese fue uno de sus apellidos de casada, pues el de soltera era Robson.  Nació en 1832 en un pequeño pueblo del condado de Durham, en el seno de una familia minera.



            Su padre, que era capataz, sufrió una grave caída en su trabajo, muriendo en el acto. Su madre, que enviudó muy joven, volvió a casarse. Como las relaciones entre su padrastro y ella no fueron nunca muy buenas, se fue a trabajar como enfermera a un pueblo cercano al suyo.



            Más tarde, volvió a casa de sus padres y enseguida se casó, cuando tenía unos 20 años con William Mowbray. Se trasladaron a Plymouth, donde él también trabajó en la minería. Tuvieron 5 hijos, 4 de los cuales murieron por las fiebres gástricas que eran tan comunes en la época.



            Más tarde, se trasladaron al NE de Inglaterra, donde tuvieron 3 hijos más, que murieron a causa de la misma enfermedad. William murió en 1865 a causa de un problema intestinal, dejando a su viuda, entre otras cosas, un seguro de vida por 35 libras. Una buena suma para esa época.



            La viuda decidió trasladarse a otra localidad del mismo condado, donde murió la última hija que había tenido en su primer matrimonio. Allí trabajó en un sanatorio con enfermos contagiosos y conoció a un ingeniero llamado George Ward, con el que se casó en 1865.



            No obstante, el marido siguió con su enfermedad, aunque se agravó, por problemas intestinales, y falleció en 1866. Mary Ann, también cobró en este caso la indemnización por el seguro de su marido.



            En 1866 James Robinson, que había enviudado recientemente,  la contrató como ama de llaves. Un mes más tarde, el bebé de James murió a causa de problemas estomacales.



            Además, como la madre de Mary Ann, se había puesto enferma, no se le ocurrió otra cosa que irse a vivir con su hija. Al principio mejoró, pero a los pocos días murió por la misma causa.



            Robinson observaba en su mujer una conducta extraña y, sobre todo, cuando le insistía mucho en que se hiciese un seguro de vida. No obstante, como vio que le había cogido dinero, la echó de casa, pensando que era simplemente una ladrona.



            De pronto, ella se encontró en la miseria y vagando por las calles. Entonces, conoció a una mujer llamada Margaret Cotton, la cual tenía un hermano llamado Frederick, el cual había enviudado recientemente y ella le estaba cuidando sus hijos.



            Se fue a vivir con ellos y, en 1870, Margaret murió a causa de unas fiebres estomacales. Ese mismo año, se casó con Frederick y tuvieron un hijo nacido en 1871. Ella se enteró de que uno de sus anteriores amantes vivía en el pueblo de al lado y persuadió a su marido para trasladarse a vivir allí. En este caso, también consiguió que su marido se hiciera un seguro de vida para él y otro para cada hijo. Así que, en diciembre de ese mismo año, falleció por la misma causa que los anteriores.



            En ese pueblo volvió con su anterior amante, Joseph Nattrass, y encontró otro en la casa donde estuvo trabajando, John Quick-Manning, con el cual comenzó una relación que dio como fruto otro hijo.



            No hace falta decir que los hijos de Frederick murieron pronto, en 1872, de la misma enfermedad que los demás y Nattrass poco después.



            Fue arrestada a causa de una denuncia, porque en una ocasión dijo que su último hijo, que ya estaba enfermo “tendría el mismo final que el resto de los Cotton”.



            En un principio la denuncia fue archivada, pero saltó a la prensa. Estos comenzaron a hacer indagaciones y descubrieron su vida anterior y todos los fallecimientos que había ido dejando a su paso.  



            Se volvió a exhumar el cadáver del último hijo fallecido y se comprobó con un examen más detallado, que tenía restos de arsénico.



            El juicio duró 3 días, al final de los cuales el jurado emitió su veredicto de culpabilidad.



            La ejecución se retrasó, pues la acusada estaba embarazada y esperaron que diera a luz. Mientras tanto, llegaron muchas peticiones de clemencia al Ministerio de Interior, pero no fueron atendidas.



            Finalmente, fue ejecutada en 1873, en una prisión de su condado. En total, llegó a matar por envenenamiento a 21 personas.



           

3 comentarios:

  1. Tengo una curiosidad: ¿qué pasó con el niño? ¿Sabrá ese crío sobre su origen?

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  2. La niña se llamó Margaret Edith Quick-Manning Cotton y, según se ha publicado en Internet, fue dada en adopción y su rastro se ha perdido.

    Saludos.

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  3. Vaya pieza la tal Mary Ann, y lo más terrible es que tendrían una muerte horrible.

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