Como ya sabemos, a los franceses
les ocurre como a los británicos, que tienen una memoria selectiva y sólo
recuerdan lo que les interesa. Así que voy a contar lo que le ocurrió a este
antiguo presidente de la República Francesa.
Su padre fue Émile Deschanel y su
madre, Adèle Feigneaux. Esta última de nacionalidad belga.
La razón por la que Paul nació en
Bélgica fue porque su padre, que era francés, había sido desterrado allí por
oponerse al régimen del emperador Napoleón III.
Curiosamente, Émile celebró la
llegada de Luis Napoleón a la presidencia de la II República francesa, porque
era un ferviente republicano. Sin embargo, luego se opuso al golpe de Estado,
que le hizo ser emperador de Francia.
Émile fue un insigne profesor
especializado en la literatura de los clásicos greco-latinos. Sin embargo, los
artículos y libros que escribía, donde mostraba sus opiniones de una forma muy
sincera, le hicieron perder algunos trabajos.
Es por esa razón por la que fue detenido en enero de 1852 y, aunque fue puesto en libertad 3 días después, se le obligó a exiliarse en Bélgica.
El caso es que le ofrecieron un trabajo mucho mejor en Suiza, pero él prefirió residir en Bélgica.En 1859, gracias a la amnistía
ordenada ese año por Napoleón III, la familia pudo regresar a Francia. No
obstante, Émile se negó a prestar juramento al emperador, por ello, no pudo
acceder a un buen puesto en el prestigioso Collège de France.
Parece ser que tampoco consiguió
ingresar en la Academia Francesa y, cuando casi lo iba a conseguir, le cedió
esa plaza a su hijo.
Volviendo a nuestro personaje de
hoy, por lo visto, su padrino fue nada menos que Víctor Hugo. Uno de los
grandes amigos de su padre.
Paul realizó sus estudios en
Francia y los culminó con una licenciatura en Filosofía y otra en Derecho.
Empezó trabajando a las órdenes
de otro político republicano amigo de su padre, Émile de Marcère. Curiosamente,
el padre de éste fue uno de los guardaespaldas del rey.
Paul fue secretario de este político, mientras fue ministro del Interior y, poco después, lo nombró subprefecto de una provincia, siendo el más joven de Francia.
También, en esta época, empezó a escribir artículos en varios periódicos. En esa provincia, llegó a ejercer una temporada como prefecto, ya que el auténtico prefecto cayó enfermo.A partir de 1876 fue nombrado
secretario personal del nuevo presidente del Gobierno, Jules Simon.
Voy a hacer un inciso, para que
no se me olvide mencionarlo. Al ver el apellido Deschanel me ha venido a la
cabeza una serie de tv titulada Bones. Precisamente, la protagonista de la
misma es una actriz llamada Emily Deschanel.
Parece ser que no he sido el
único que al que le ha llamado la atención esta coincidencia. He estado mirando
en Internet y he encontrado que una persona ha investigado la genealogía de esta
actriz y la de nuestro personaje y ha llegado a la conclusión de que, aunque la
familia de la actriz proceda de Francia, no está emparentada con este político.
Paul fue elegido diputado en 1885. Curiosamente, fue reelegido por la misma circunscripción electoral, y por una amplia mayoría, hasta 1920.
No sé si eso se debería a sus
grandes capacidades oratorias, las cuales eran elogiadas, no sólo por sus
partidarios, sino también por sus oponentes políticos.
En 1898, alcanzó, por primera
vez, la presidencia de la Cámara legislativa. Cargo al que regresaría en 1912 y
ocupándolo durante toda la I Guerra Mundial.
Siempre se le consideró una
especie de republicano moderado. Colocado en un puesto intermedio entre los
socialistas y los liberales.
En 1901, con 46 años, se decidió
a casarse con una joven 21 años menor que él. Se llamaba Germaine Brice. Uno de
los testigos de la ceremonia religiosa fue nada menos que el presidente de la
República, Émile Loubet.
Según parece, el matrimonio fue feliz y tuvieron una hija y dos hijos. Uno de ellos murió combatiendo en la II Guerra Mundial.
En 1920, se presentó a las
elecciones para presidente de la III República. Llegó a quedar muy por delante
de Clemenceau, al que se le consideraba el padre de la victoria de Francia en
la I Guerra Mundial. Será porque éste era muy radical, de hecho, le apodaron
“el tigre” y los franceses estarían ya muy hartos de belicismos.
Clemenceau fue el que más
presionó en Versalles para que se le impusieran las medidas más duras a
Alemania. Parece ser que, cuando Deschanel conoció el tratado que habían
firmado, exclamó: “Acabamos de firmar la segunda guerra mundial”. Ciertamente,
fue una frase premonitoria sobre lo que iba a ocurrir unos 20 años después.
Como ya he dicho, venció
ampliamente en las elecciones para presidente de la III República Francesa. De
hecho, obtuvo el mayor porcentaje de votos de todas las elecciones para la
presidencia francesa.
También es uno de los dos
presidentes de Francia, que han nacido en el extranjero. El otro fue Giscard
D’Estaing, que nació en Alemania.
También es el único presidente de la República que nunca fue ministro, ni presidente del Gobierno.
A pesar de que se lo ofrecieran en varias ocasiones. Sin embargo, fue elegido miembro de varias academias francesas.Por otro lado, como siempre fue
contrario a la pena de muerte, durante su presidencia no se ejecutó a ningún
reo.
El 18/02/1920 se efectuó el
traspaso de poderes entre el presidente saliente, Raymond Poincaré, y el
entrante, Paul Deschanel. Curiosamente, renovó el mandato de Alexandre
Millerand, como presidente del Gobierno, aunque sus relaciones nunca habían
sido muy buenas, pero llevaba poco tiempo en ese cargo.
Por lo visto, Deschanel, se
empeñó en restablecer las relaciones diplomáticas con el Vaticano. Algo que fue
bien visto por el Papa. Sospecho que algo tendría que ver que, durante esas
negociaciones, se produjo la canonización de Santa Juana de Arco.
Parece ser que sus relaciones con Millerand fueron cada vez peores.
Una muestra de ello fue la discusión sobre la política del Gobierno hacia Alemania, que a Deschanel siempre le pareció demasiado débil.Es posible que a alguno le
choquen los roces entre el presidente de la República y el presidente del
Gobierno de Francia. Hasta la llegada de la actual V República, el presidente
de la República era un personaje con un poder nominal y con un carácter
representativo, como los actuales de Alemania o Italia. De hecho, entonces ni
siquiera había un vicepresidente de Francia.
Sin embargo, a partir de la V
República, surgida en 1958, el general De Gaulle modificó la Constitución y el
poder pasó al presidente de la República Francesa, el cual es el que le dice lo
que tiene que hacer al presidente del Gobierno.
Por eso mismo, fuera de Francia
no conocemos al presidente del Gobierno francés, pero sí a los presidentes del
Gobierno de Alemania o Italia.
Parece ser que esta ausencia de poder y el exceso de trabajo le llevaron a Deschanel a un estado depresivo. Se ve impotente para llevar a cabo sus ideas. Algunos dicen que ven en su rostro señales claras de insomnio.
Ahora viene lo más impactante de
esta narración. El 23/05/1920, Deschanel, a pesar de haber cogido la gripe, se
empeñó en trasladarse hasta una localidad un tanto alejada de París, a fin de
inaugurar un monumento a un héroe local, llamado Émile Reymond, fallecido en la I Guerra Mundial.
Tomaron un tren nocturno en la
Estación de Lyon y, después de cenar, Deschanel se fue a dormir al vagón
presidencial. A partir de aquí la cosa no está nada clara, porque los miembros
del Gobierno francés quisieron escurrir el bulto.
Como ya he dicho, Deschanel tenía problemas de insomnio. Por eso, solía tomar pastillas para conciliar el sueño. No se sabe si ese día tomó más de lo normal. Lo cierto es que, cuando fue a abrir la ventana de su dormitorio, quizás porque tenía mucho calor, cayó a la vía.
Parece ser que tuvo suerte,
porque el tren no le pilló y porque cayó encima de un bancal de arena. Aun así,
se dio un golpe en la cara.
Habrá quien se extrañe de que se
pueda caer uno por la ventana de un tren. La verdad es que, en los trenes
antiguos, que hemos conocido, sólo se podía abrir la parte de arriba de la
ventana. Sin embargo, en el tren de Deschanel, se abría la parte de abajo. No
obstante, tampoco era muy grande, sólo medía 42 cm de alto.
Así que tenemos a una persona,
que se ha caído de un tren. Va todavía vestido con su pijama y no sabe dónde
está, ni lo que le ha ocurrido. De esa manera se lo encuentra un obrero de
mantenimiento de las vías ferroviarias, llamado André Radeau.
Me hubiera gustado ver la cara de
Radeau, cuando se encontró con este tipo, que afirmaba ser el presidente de la
República. Ya se sabe que hay muchos locos que dicen ser Napoleón.
Lo cierto es que lo acompañó
hasta la siguiente estación ferroviaria y allí le dejaron descansar y le vio un
médico el golpe que tenía en la cabeza.
Por otro lado, en el tren nadie
se había enterado de la ausencia del presidente. Unas horas después, cuando un
criado entró en el dormitorio, se dio cuenta de que estaba vacío. Así que dio
la voz de alarma.
Todo el mundo se puso a buscarlo,
pero no tuvieron que esperar mucho tiempo, porque pronto les llegó la noticia
de que estaba en una de las estaciones del trayecto.
También dijeron algunos que
podría haber sido un intento de suicidio. Sin embargo, se le tenía por una
persona muy equilibrada. Con una vida ordenada y que apenas tenía enemigos.
Incluso, tenía una familia que le apoyaba en su trabajo.
Me imagino que, si hubiera
ocurrido aquí, seguro que el suceso hubiera aparecido en todas las coplas de
los Carnavales. Incluso, hubiéramos visto grupos de comparsas, con todos sus
miembros vestidos con pijama y cantando coplas alusivas a este hecho. En fin, es
lo que se llama materia cachondeable.
Parece ser que Deschanel tenía
una enfermedad llamada neurastenia y es posible que hubiera realizado ese hecho
durante un agravamiento de la misma.
Por lo visto, luego se publicó
que la venía padeciendo desde hacía un tiempo. En una ocasión, recibió a un
grupo de colegialas. Éstas le dieron un ramo de flores y él se lo tiró a la
cara.
En otra ocasión, recibió al
embajador británico vistiendo su pijama, donde había colocado una serie de
medallas. Desconozco si es que dormiría con las medallas.
En España, sólo es obligatorio llevar siempre la Cruz Laureada de San Fernando, pero no creo que ningún militar duerma con ella.
También se dijo que podría
padecer el síndrome de Elpenor, que produce una especie de sonambulismo.
Lo cierto es que le había creado
un gran problema al Gobierno de Francia, porque no tenían nada previsto para el
caso de que un presidente se volviera loco. Ni siquiera existía la figura del
vicepresidente.
Parece ser que el Gobierno le
presionó para no dimitiera, mientras pensaban qué hacer. Sin embargo, los
médicos le recomendaron reposo absoluto.
Así que se fue, acompañado por su familia, a una mansión en la región de Normandía y luego residieron en el famoso castillo de Rambouillet.
Desgraciadamente, Deschanel no
notó ninguna mejoría y, a mediados de septiembre de ese mismo año, le envió su
carta de dimisión al presidente del Gobierno. Curiosamente, fue el mismo
Millerand el que le sucedió en el cargo de presidente de la República.
Afortunadamente, esta vez,
Deschanel, decidió ir a un sanatorio situado en el sur de Francia. Allí pasó 3
meses y regresó casi recuperado.
Parece ser que no regresó tan
moderado como de costumbre. Por lo visto, en abril de 1922, tenía previsto leer
en discurso ante el Senado. En él, criticaría las negociaciones de paz y la
actitud del Gobierno británico. También quería mencionar su desacuerdo por el
poder del presidente del Gobierno frente al de la República.
Supongo que esas noticias llegarían a oídos del Gobierno y de la presidencia. Así que el presidente del Senado optó por cerrar las sesiones, adelantando las vacaciones de Semana Santa, para aplazar la lectura de ese contundente discurso.
Tras la Semana Santa, enfermó con
algo que parecía una gripe, pero que se agravó con una pleuresía o pleuritis.
Por ello, le realizaron una punción para sacarle el líquido de los pulmones.
Incluso, le operaron para quitarle 2 costillas.
Desgraciadamente, no pudo superar
esa enfermedad y murió el 28/04/1922.
En la Antártida, dentro de la
Tierra de Graham, han bautizado una montaña con el nombre de Pico Deschanel.
TODAS LAS IMÁGENES PROCEDEN
DE WWW.GOOGLE.ES
No hay comentarios:
Publicar un comentario